Los dientes de leche

“La comunidad científica lleva décadas tratando de identificar a las personas con riesgo de desarrollar un problema de salud mental en el futuro, especialmente los niños. Imagínate si los dientes fueran el primer paso para desvelar el misterio”, explica Erin Dunn (investigadora del Hospital General de Massachusetts), quien está convencida de que la boca de los pequeños esconde pruebas que permitirían adelantarse a estos problemas. Pero, según su teoría, recopilarlas requiere rapidez; ya que están ocultas en los dientes de leche.

Afortunadamente para ella, treinta y siete padres de California donaron un diente de leche de sus hijos de seis años a los científicos de un estudio pensado para monitorizar su salud durante 7 años, conocido como Peers and Wellness Study. Además, durante este período, los investigadores evaluaron el comportamiento de los niños a través de cuestionarios que rellenaron sus padres y sus profesores.

Dunn asegura que el trabajo de su equipo ha permitido detectar en estos dientes parámetros relacionados con síntomas posteriores de problemas emocionales y de conducta como la agresividad, la impulsividad, la hostilidad y el hábito de no prestar atención ni escuchar. Según relata, las pistas afloraron tras hacer un análisis de imagen en alta resolución de las piezas dentales, que sirvió para obtener datos del volumen de la pulpa y del esmalte dental que los recubre.

“Vimos que los niños que tenían un esmalte más fino también tendían a tener más síntomas”, explica la científica. El volumen de la pulpa también estaba relacionado con el nivel de problemas emocionales y de conducta, relata Dunn, como si estuviera apunto de abrir en la boca una ventana a la mente infantil potencialmente enferma. “Los antropólogos, los arqueólogos y los dentistas centran su trabajo en los dientes continuamente, pero para los investigadores en el campo de la salud mental esto es muy novedoso”, añade.

Las pistas quedan registradas antes de cumplir un año

Los científicos se centraron en los incisivos de los pequeños porque están entre los dientes que antes se forman. Empiezan a originarse en el embarazo y suelen completar su formación durante el primer año de vida. Según explica la científica, estas piezas dentales registran eventos que sucedieron durante esos períodos de tiempo, aunque cómo dejan su rastro en ellos aún es un misterio. Para Dunn, las diferencias en el grosor del esmalte podrían estar relacionadas con aspectos como la nutrición de la madre durante el embarazo y el estrés que sufrió, o podría ser una consecuencia de la manera en la que el bebé experimentó su entorno. “No sabemos exactamente qué es lo que están registrando los dientes y qué está causando que el esmalte y la pulpa sean más finos”, admite.

En cualquier caso, lo que excita su curiosidad es el enorme potencial de los resultados de su investigación, que ha dado a conocer esta semana en la Reunión Anual de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia, en Washington. “Si hay pruebas de riesgo de desarrollar problemas mentales en los dientes de los niños, las oportunidades para la prevención serían extraordinarias”. Y, si no se equivoca, dichas pruebas podrían ser muy sólidas.

Según su análisis, la relación entre la anatomía de los dientes de leche y la salud mental es tan fuerte como la que muestran otros indicadores que la comunidad científica usa habitualmente. “La magnitud de la correlación fue equivalente, incluso superior en algunos casos, a las asociaciones que vimos con el estatus socioeconómico, que es uno de los factores de riesgo más altos para los síntomas de salud mental”, asegura la investigadora. El hallazgo de Dunn podría ser otra insospechada utilidad de los dientes de leche, que algunos dentistas recomiendan extraer antes de que se caigan porque contienen células madre.

Resultado de imagen de diente de leche

COMENTARIO: 

Esta innovadora investigación nos puede aportar mucho a corto plazo. Después de que se confirme la información que los dientes de leche poseen sobre la futura conducta y personalidad de los niños, esta técnica se podría utilizar a nivel mundial. Sería además de muy útil, práctica para así poder detectar futuras enfermedades o trastornos de manera totalmente indolora. De esa forma se podrían tratar y prevenir problemas mentales de los que puede haber índices en los dientes de leche.

Por lo tanto este original método nos puede servir de gran ayuda en un futuro no muy lejano, ya que algo que antes considerábamos practicamente inútil oculta realmente información muy importante en su interior.

 

3 Respostas a “Los dientes de leche”

  1. sara areoso Dixo:

    Después de tanto tiempo y tantos estudios tratando de identificar a personas con riesgo de desarrollar problemas de salud mental, sobre todo en niños, es realmente impresionante todo lo que revelan estos nuevos estudios. En caso de demostrarse su veracidad, y en principio todo apunta a que son pruebas muy sólidas, abrirían un nuevo camino para la prevención de estos problemas tan complejos y cada vez más habituales.

  2. andrea pichel Dixo:

    Pareceme realmente impresionante que a partir dos dentes de leite dos nenos se poida chegar a detectar se nun futuro padeceran problemas de tipo mental. Creo que é unha investigación que pode chegar a aportar moito nun futuro, ao igual que servirá de gran axuda á hora de curar este tipo de enfermidades mentais, cada vez máis frecuentes.

  3. martin regueiro Dixo:

    En la entrada anterior se muestra algo que hasta el momento pasó desapercibido para los científicos y es que una capa delgada de la esmalte de diente podría ayudar a predecir el riesgo de desarrollar problemas de salud mental más adelante en vida.
    En este caso fue Erin Dunn quien descubrió el gran hallazgo después de analizar los dientes donados por 37 niños de seis años. También realizó todo un estudio acerca de la conducta de los niños cuyos dientes fueron donados.
    La capacidad de determinar a estos niños en un primero tiempo podría ayudarles para recibir la ayuda psicológica que pueden necesitar antes de que desarrollen problemas de salud mentales en un futuro.