Bebés modificados genéticamente
El biólogo ruso Denís Rébrikov sostiene en una entrevista concedida a la revista Nature que antes de que acabe el año tiene intención de crear bebés transgénicos, si recibe los consiguientes permisos de las autoridades. La idea consiste en implantar a madres infectadas con el VIH embriones editados genéticamente mediante la manipulación del gen CCR5 a partir de la herramienta Crispr-Cas9. De esta manera, el riesgo de que el pequeño adquiera la enfermedad de su progenitora se reduce considerablemente.
El primero en atreverse a dar ese paso fue el biólogo chino He Jiangkui quien provocó con ello un enorme revuelo en la comunidad científica. El científico chino anunció el pasado mes de noviembre la aparición de los primeros niños modificados genéticamente gracias a su método.
Pero Rébrikov asegura que su procedimiento de alteración del gen CCR5 será más útil, menos arriesgado y más éticamente justificado y aceptable para la sociedad. El biólogo se propone desactivar el gen que codifica una proteína que permite que el VIH penetre en las células del organismo. Los embriones obtenidos de esa forma se colocarían en el útero de la madre seropositiva y habría un menor riesgo de transmisión del virus.
Rébrikov, doctor en biología molecular, dirige un laboratorio de edición genómica en la Clínica de Investigación Ginecológica Kulakov de Moscú, de fecundidad y fecundación in vitro y trabaja además como colaborador científico en la Universidad de Medicina Pirogov. Coopera también con un departamento de lucha contra el VIH para tratar de incorporar a sus experimentos a mujeres infectadas que deseen quedarse embarazadas.
Pero otros científicos también entrevistados por Nature expresaron su preocupación por los planes del científico. «La tecnología no está lista», ha dicho Jennifer Doudna, una de las «madres» científicas de la técnica CRISPR-Cas9, que Rebrikov pretende usar. «No es sorprendente, pero sí muy decepcionante e inquietante».
El genetista ruso de la Academia Rusa de Ciencias Naturales, Ígor Dolotovski, ha alertado de que lo que quiere hacer su colega «es potencialmente muy peligroso»: «Aquí hay una pregunta ética: ¿se pueden hacer experimentos con personas y cambiar el genoma humano?», se ha preguntado.
Un comité de la Organización Mundial de la Salud (OMS) está estudiando la regulación de las tecnologías de edición de genomas humanos. Una de sus integrantes, la investigadora de la Universidad de Wisconsin-Madison Alta Charo, ya ha dicho que le parece «irresponsable proceder con este protocolo en este momento».
Esta tecnología permitiría curar enfermedades genéticas, pero es polémica porque los genes editados se transmiten a las próximas generaciones. Otro de los inconvenientes es que la tecnología puede provocar modificaciones en el ADN no buscadas, lo que podría resultar peligroso si, por ejemplo, se inactivan genes supresores de tumores.
La implantación de embriones editados genéticamente está prohibida en muchos países. En Rusia la ley prohibe la ingeniería genética en la mayoría de las circunstancias, pero no está claro cómo se aplicarán estas normas a los embriones. El investigador ruso ha dicho que comenzará sus experimentos antes de que Rusia discuta sus regulaciones, si lo puede hacer de forma segura. «Creo que estoy lo suficientemente loco como para hacerlo», ha dicho en Nature.
COMENTARIO:
Hace unos meses se producía un gran revuelo a nivel mundial después de que naciesen dos niñas que habían sido editadas genéticamente por un biólogo chino.
Ahora el biólogo ruso Denís Rébrikov pretende hacer lo mismo aunque asegura que su método será más útil, menos arriesgado y más aceptable para la sociedad.
Aún así este tema ha vuelto a convertirse en una gran polémica, y es que se teme que editando genéticamente a un embrión se puedan provocar otros cambios no buscados y que puedan ser perjudiciales.
Por el momento la ley en Rusia no especifica nada sobre la ingeniería genética en embriones, así que Rébrikov pretende comenzar sus experimentos lo antes posible antes de que Rusia cambie su ley.
Yo creo que editar genéticamente embriones puede tener sus consecuencias en un futuro, ya que aunque gracias a esa edición el bebé no sufrirá VIH, quizá sufra otras enfermedades como consecuencia de la edición genética. Además esos genes editados se transmitirían de generación en generación y las consecuencias que puede tener esto a la larga son un poco impredecibles.